Vacio lleno de mas vacio.

Llega la hora donde la luna te cuenta su historia
y la oigo, la oigo con mucha pereza.
Que tenes hoy para ofrecer?
Cual es tu reflexión acerca de este día templado?

Quizás por ser ingrato solo te dedico una mirada vaga,
la misma mirada estúpida que me dedicas día a día.
Tomo una, dos, y hasta tres botellas de
lo que alguna vez llame sobriedad.

Me confundís cada vez mas y mas espectro lumínico.
Me enfureces por que no hablas con palabras,
por que solo decís lo que no quiero escuchar
tan solo titubeas luces otarias.

Te apareces en mis sueños como dueño de mi ser
y te odio, te odio con todo mi corazón.
Te odio, después de haberme mirado a los ojos
y después de tanto tiempo haberme dicho palabras tan hirientes.

Me fijaste los ojos, y con la mirada mas tierna recuerdo tus palabras:
''Siempre te ame, nunca te deje de amar y querer,
no fue fácil par mi, pero siempre te lleve en mi corazon''.
No alcanza mala palabra para maldecir mi dolor.

Trate de separar el sueño aquel donde me miraste,
donde me hablaste, donde me besaste. Donde estuviste.
En tu ausencia tan presente dentro de mi pecho, en la realidad
trate de apartar aquel mal sabor y quererte.

Pero a pesar de amarte con todo mi ser, me lograste sembrar,
una o dos sustancias ligadas a la depresión.
Toc... Toc... Dios estas ahí? si existís, por favor
decile que solo camine por el carril correcto.

Te extraño a pesar de los años, te extraño y te quiero.
Te necesito a veces, te veo en mis sueños.
Te toco y te divisó en una constelación tan lejana,
que ni siquiera los cálculos matemáticos me darían un resultado de años luz de esa distancia.

Simplemente vivís en un inconsciente mio,
un inconsciente que trate de apartar en el cementerio de mi pasado
y aun así, logras salir de la tumba aquella
y con mucho amor me besa la frente y me aniquila.

Sin mas que decir, sin mas rodeos
solo siento que un beso tuyo, me llena el alma en aquel sueño
pero también soy consiente, que al despertar,
tan solo tendré un amargo y depresivo recuerdo.

Estés donde estés y con quien,
vos y yo sabemos,
que al contemplar esa luna divina
nuestras almas están unidas por la eternidad.